De la novena edición de «Imágenes de un tiempo pasado» del año 2011, titulada «Una mirada a la infancia», entresacamos la siguiente información sobre los juegos tradicionales:
Los niños y las niñas, desde la más tierna infancia, solían jugar por separado: «los niños con las niñas huelen a mierda de gallina», la frase que se inculcaba a los más chicos para que no se juntasen en los juegos y, sólo los más pequeños se unían a las niñas, porque ellas eran las que hacían de madres, encargándose del cuidado de los hermanos menores.
De los juegos de niñas destacamos la soga con sus pegadizas cancioncillas, repetidas alegremente al soco de un patio, en la calle, en las plazas…
«Soy la reina de los mares
y ustedes lo van a ver,
tiro mi pañuelo al agua
y lo vuelvo a recoger.
Pañuelito, pañuelito,
quien te pudiera tener,
dobladito en el bolsillo
como un pliego de papel.
Si la guerra no se acaba,
la culpa la tienes tú,
que andas recorriendo el mundo
con tu pañuelito azul.»
(Fermina Ortega Sánchez, 61 años, 1999)
Entre los juegos de niños sobresalen los que tienen que ver con habilidades manuales; los niños de ayer, con una mirada al entorno, buscaban entretenimientos y, si las niñas imitaban a sus madres jugando a las casitas, ellos hacían lo mismo con las tareas de los padres: confeccionar arados, yugos, bueyes, barcos, camiones, tractores…
«Cogíamos las manadas de tiras de plataneras, que había de remojo en el estanque de Don Carlos Navarro y nos subíamos encima o las utilizábamos de flotadores, pa’ aprender a nadar.»
(Juan Vega Henríquez, 78 años, 15.03.2011)